Ayer noche fallecía en el Convento de las Reverendas Madres Clarisas de Arnedo la religiosa, Sor Felisa de la Virgen del Manzano. Felicitas o Felisa Antón Pérez nacía el 29 de enero de 1933 en Castrojeriz, una localidad más de mil habitantes situada en el límite de las provincias de Burgos y Palencia.
Sor Felisa dejo su pueblo, su familia y todo su entorno para entrar en la orden de las hermanas pobres de San Francisco, en el convento de Santa Clara de Arnedo, La Rioja. Lo hizo a sabiendas de que en su localidad había un convento de esta misma congregación de Santa Clara, que seguro en más de una ocasión entablaría conversación con las monjas de allí para fortalecer su vocación. Entro en el convento con 21 años, el 28 de junio de 1954 y a los 6 meses el 30 de diciembre de ese mismo año tomaba el hábito. Después de cuatro años como novicia, realizaba la promesa y los votos solemnes el día de la Inmaculada Concepción el 8 de diciembre de 1958, consagrándose de por vida al Señor al que ha servido fielmente 55 años. Desde su entrada en clausura, ha sido una monja muy especial, alegre, jovial y llena de vida, que en todo momento ha reflejado en cuantos la conocíamos, tal es así que estando en el lecho de muerte en la Fundación Hospital de Calahorra, a la que tubo que ser trasladada por una insuficiencia cardiaca, de la cual no salió, hablaba en su agonía con lucidez de las enfermeras y de los médicos como serafines y ángeles que la estaban acompañando en sus últimos momentos.
En el convento su labor también ha sido el de convivencia con sus hermanas con alegría. Tenía unas manos especiales de donde salían primorosas obras de arte, ella era una buena bordadora, y después cuando se dejaron los bordados, su manejo de la máquina hacia que las tareas de calzado que las religiosas realizan, ella también era una profesional y las realizaba con soltura y garbo. Ha servido a la comunidad como portera más de 12 años, y ahora era la encargada del receptorio-comedor.
Hablando con la Abadesa, nos decía’ se le va ha echar mucho de menos, ya que era todo vitalidad y alegría’. Hoy a las 12 se ha realizado el funeral y la conducción de su cuerpo al cementerio del cenobio. El oficio ha estado presidido por el Vicario del Obispado, de Vida Religiosa, y concelebrado por ocho sacerdotes. La iglesia ha estado llena de familiares y gente que ha querido dar el último adiós a Sor Felisa de la Virgen del Manzano, patrona de su localidad y a la cual le han cantado sus familiares y amigos que han llegado desde Burgos. Sor Felisa, descanse en paz y que en el encuentro que va a tener con su amado, Jesús, abogue por todos nosotros.